Los Retos De La Lectura En La Era De Internet Resumen

De este modo, ya que, la lectura es una actividad «novedosa» y complicada y, como tal, muy sensible a la manera en que se aprende y se practica. Y el medio digital está transformando el modo en que leemos. Entre otros muchos efectos, hace difícil nuestra capacidad de concentración y focalización. Como hizo la revolución provocada por Johannes Gutenberg hace ya casi seis siglos, las tecnologías de la información y la comunicación y también Internet han cambiado a la raza humana para toda la vida.

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«Cada vez que bajas una aplicación predeterminado debes decir que no admites notificaciones», sugiere Martínez Rives. «Dejar de estar sometido a interrupciones permanentes va a hacer que te cueste menos lo que tienes que llevar a cabo, ya sea leer una novela o cocinar unos macarrones. ¿Por qué razón tendré que recibir los mensajes en el momento en que desea el que lo manda?

Un lector asiduo acaba por sentir curiosidad por distintos historias y tarde o temprano llegará a los enormes de la literatura, solo hay que dejarle madurar. Para usar un dispositivo para leer libros, los pequeños necesitan entender de qué forma usar sus gadgets con el propósito de leer en ellos. Un libro sencillamente se debe coger con las manos y gozar del tacto de sus páginas, del olor peculiar… Comenzar a leer y permitir que la imaginación comience a trabajar por ella sola. La primera referencia histórica a un sistema de hipertexto viene de Vannevar Bush, quien en 1945 escribió su célebre artículo ‘As we may think’, donde charlaba de un sistema que asociaba la información mediante links asociativos . Ted Nelson fue el primero en emplear la palabra hipertexto, en 1965, para determinar el material digital interconectado. Hay técnicas para que las tecnologías que nos facilitan la vida no se terminen volviendo contra nosotros.

Cuando es necesario comparar información de diferentes páginas y la navegación se torna más complicada, los buenos leyentes suelen llevar a cabo múltiples visitas a la misma página, e ignoran las páginas irrelevantes. Para algunos críticos, la literatura digital supone un nuevo género literario, para otros solo una exclusiva forma de presenciar con la literatura, o mejor, la única manera que la literatura tiene hoy en dia de experimentar novedosas maneras de creación. En este sentido, hay que distinguir entre la literatura en formato digital y la ludología que surge en el siglo XXI para teorizar sobre videojuegos, varios de los cuales provienen de la literatura . Para no perder al lector que llevamos dentro, en el sentido que Salinas daba a la palabra lector, requerimos desarrollar lo que Wolf llama el cerebro «biliterario», es decir, compaginar niveles diferentes de lectura.

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En general, en el formato digital tendemos a realizar una lectura en diagonal de la información. El planeta de la lectura como sistema complejo implica distintos actores como son la escuela, la biblioteca, los creadores o el mercado mismo forman parte de este ecosistema, por consiguiente todavía es fundamental alfabetizar a nuestros leyentes en estos nuevos contextos. El reto esta en encender políticas educativas que robustezcan la formación de leyentes, acciones que permitan el avance de habilidades lectoras, pero más que nada promover el entusiasmo por la lectura placentera.

De este modo lo entiende asimismo la Federación del Gremio de Editores que en su último Informe 2017 solicita explícitamente al Gobierno que la educación pivote cerca de la lectura, evitando regular su enseñanza, como ordena la presente ley de educación, la Lomce, de forma “vaga y confusa”. La lectura se fomenta también mediante el respeto hacia los libros, cuidarlos mientras que los leemos, llevar cuidado de no perderlos, pintarlos o usarlos para objetivos que nada tienen relación con la lectura. La mayoría de los libros para niños llevan una moraleja final y muchos sirven para que se vayan dando cuenta de las emociones de la vida real o de las consecuencias que pueden acarrear algunas acciones. », «Mira, el niño se siente mal porque el resto se ríen de él» Y así, de a poco, podemos ir enseñando a nuestros hijos a expresar lo que sienten o a que nuestras acciones tienen consecuencias en el resto. Para los mucho más mayores asimismo tenemos la posibilidad de explotar los libros que tienen una trama y final abiertos, en los que nuestro lector es el que elige de qué forma quiere que siga la historia tomando las decisiones por el personaje principal. A los bebés les agrada que los individuos cobren vida, si lees un cuento de manera lineal, sin cambios de expresión y sencillamente pensando en el momento en que se marcha a terminar es muy posible que hayan encontrado una forma a fin de que a tu hijo no le guste leer.

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Es más, no parece que la preferencia por la multitarea y la autoeficacia percibida para enfrentar esta clase de situaciones sean buenos indicadores de que se es mucho más eficiente. David Sanbonmatsu, de la Universidad de Utah, y sus ayudantes concluyen en un artículo publicado en PLOS ONE que quienes se perciben como eficaces en la multitarea por norma general sobreestiman sus habilidades. Además de esto, los humanos que frecuentemente se involucran en 2 o más ocupaciones simultáneas lo hacen porque son menos capaces de eludir las distracciones y concentrarse en una única tarea. No semeja, por consiguiente, que la multitarea y un contexto que la fomenta sean la mejor forma de practicar la lectura. Los datos de comprensión lectora según el último informe Pirls han mejorado en nuestros país 15 puntos pero aún quedan por debajo de otros lugares donde la lectura pertence a las tareas prioritaria en los primeros años de la educación formal.

«Uno de los efectos de lo digital es que leemos más», añade Lasén. “Con los móviles inteligentes leemos continuamente comentarios de otra gente de forma fragmentada y apurada». No obstante, apunta esta socióloga que esta lectura en redes sociales no es justo equipararla con la lectura que antes de internet se hacía de un libro.

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En el momento en que nuestros hijos sepan leer, podemos aprovechar para que sean ellos quienes nos lean un cuento a nosotros, esto fortalecerá su comprensión lectora, su habilidad en la lectura y su autovaloración siendo ellos ahora los que leen a quien tanto les leyó de pequeños. También que sean ellos los que les lean a sus hermanos pequeños o aun a sus mascotas les puede ser de mucha ayuda. No cabe duda de que la manera más óptima para que un niño se sienta atraído por la lectura es que nos vea leyendo, ¡si bien sea la etiqueta de la pasta para la sopa! Y más que nada que nos vea leer libros, de los de papel, por el hecho de que de este modo evitaremos las tentaciones de que lo confundan con juegos de la tablet. El almacenaje o ingreso técnico que se utiliza de forma exclusiva con fines estadísticos anónimos. Sin un requerimiento, el cumplimiento voluntario por la parte de tu Distribuidor de servicios de Internet, o los registros auxiliares de un tercero, la información almacenada o recuperada sólo para este propósito es imposible utilizar para identificarte.

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Por ejemplo, la aptitud de leer con profundidad y concentración textos de una notable extensión. Aun los «buenos» leyentes, aquellos con un dilatado currículo de lecturas en su haber, dice que asimismo experimentan en los últimos tiempos cada vez menos «paciencia cognitiva» para leer textos complejos. De tanto leer en diagonal en las pantallas cuesta poco a poco más enfrentarse a una lectura descansada.

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«Lo que hay es que remover esas tentaciones a lo largo del rato que queremos dedicar a a algo. La concentración se entrena y lo mismo que se pierde se puede recobrar». Según el informe de la Federación del Sector de Editores, se está ensanchando la base social porque en las últimas décadas se ha escalado en la capacitación de la población en general, y hay más universitarios que nunca.

Y van a pasar varias cosas que cambiarán la manera de leer”. Adjuntado con Rakefet Ackerman, del Instituto Technion de Israel e miembro de E-Read, proyecto europeo sobre la lectura en la era de la digitalización, examinamos si el medio de presentación de la información redactada puede afectar a su comprensión. Los desenlaces de nuestro estudio, publicados en 2018 en Educational Research Review, prueban que la lectura en pantalla dificulta la comprensión y el recuerdo de la información, en especial bajo ciertas situaciones. Más allá de que no todos los estudios que hemos analizado en nuestro trabajo reportan diferencias entre los dos medios de lectura, el promedio de todos y cada uno de los desenlaces revela que hay una peor entendimiento y un peor recuerdo de la información si se lee en pantalla. En otras expresiones, para un alumno que esté empezando sus últimas semanas de curso, leer en pantalla podría sospechar regresar al nivel de entendimiento lectora que presentaba a principios del año académico. También ha tomado particular relevancia la idea de que el medio digital está cambiando nuestra forma de leer.

La literatura forma una sección fundamental de un patrimonio bibliográfico rico, variado y increíblemente valioso, por el hecho de que supone la manifestación de un pasado en el que convergen la identidad nacional y la variedad cultural de los pueblos. Digitalizar las obras literarias es un ejercicio de memoria histórica colectiva. Aunque si usted llegó en el final de este artículo de 3.211 palabras, quién sabe, es posible que el libro de Wolf se equivoque. Si las novelas del siglo XIX se edificaban con la magnificencia y composición de una catedral, la lectura online tiene más que ver con el caos de un mercadillo en el que se marcha picoteando de aquí y allá.

También, los primeros registraron un mayor nivel de concentración en la tarea, lo que podría argumentar que su nivel de comprensión sea equiparable al de aquellos que leen sin límite de tiempo. En cambio, los universitarios que leyeron en pantalla no amoldaron su concentración a las exigencias de la lectura bajo la presión del reloj. Tampoco los sacrificios gubernativos por incluir las TIC en los centros educativos están cumpliendo las expectativas.